estados-unidos_01_port

Trump como síntoma de la decadencia Imperial

No más imperio de armas, imperio de saqueos, imperio de engaños

Por Fernando Buen Abad Domínguez

Donald Trump no es un accidente “rentable” aislado en la historia de USA. Es la cristalización grotesca de un sistema que lleva siglos nutriéndose de la violencia organizada, del saqueo sistemático, de la explotación de los pueblos y de la mentira institucionalizada. Su figura concentra, como una botarga obscena, todo lo que el capitalismo-imperialismo estadounidense produce en su fase más degenerada; la adoración a las armas, la codicia sin límites, la manipulación mediática, el racismo estructural y la glorificación de la ignorancia cínica como estrategia política. Trump es el síntoma y la enfermedad a la vez; síntoma de un imperio en decadencia y enfermedad que acelera la descomposición del planeta bajo el yugo de las armas, el saqueo y el engaño. La muerte misma.

Su imperio de las armas. En la trayectoria de Trump, el negocio de las armas no aparece sólo como política de Estado, sino como espectáculo mediático. Desde su presidencia se multiplicaron los presupuestos militares, se fortaleció el complejo industrial-armamentista y se celebraron abiertamente las alianzas con fabricantes de muerte. Trump convirtió los desfiles militares, los despliegues de tropas y la venta de armas en símbolos de “grandeza nacional”. En su retórica, las armas no son instrumentos de muerte sino emblemas de patriotismo, poder y masculinidad. Nuestro análisis semiótico nos obliga a mirar más allá de las cifras del gasto militar. Cada discurso suyo sobre la “defensa de la nación” era, en realidad, un signo destinado a infundir miedo, a fabricar enemigos externos e internos. Trump necesitaba enemigos para justificar el negocio de las armas; inmigrantes, musulmanes, gobiernos soberanos que no se sometían al dictado estadounidense. Bajo su mandato se intensificó la lógica del miedo como recurso electoral, se armó ideológicamente a sectores reaccionarios de la sociedad y se dio oxígeno al supremacismo armado. Trump es la encarnación del imperio de las armas porque no sólo las promueve en términos económicos, sino porque convierte el signo de la violencia en mercancía política. En él se funden el empresario del espectáculo con el comandante en jefe, en una obscena naturalización de la guerra como entretenimiento.

Su imperio de saqueos. Trump es empresario del saqueo. Su fortuna se levantó sobre fraudes inmobiliarios, evasiones fiscales, estafas disfrazadas de universidades, casinos quebrados y negocios turbios. Pero más allá de su biografía personal, en su presidencia impulsó con crudeza la lógica saqueadora del capitalismo estadounidense. Redujo impuestos a los millonarios, entregó recursos naturales a corporaciones extractivistas, privatizó bienes públicos y subordinó todo al lucro de las élites. El saqueo con Trump no se limitó al interior de EE.UU. También intensificó el expolio externo; sanciones económicas contra países soberanos, robos de recursos energéticos en Oriente Medio, agresiones financieras contra América Latina. Bajo su mandato se multiplicaron los bloqueos, las confiscaciones de activos y la presión sobre gobiernos que no se arrodillaban. Fue un saqueo global disfrazado de “defensa de la libertad”.

En términos semióticos, Trump elevó a rango de virtud la figura del saqueador. Su narrativa presentaba la codicia como prueba de inteligencia, el enriquecimiento personal como objetivo de vida, la depredación de recursos como “crecimiento económico”. Convirtió la lógica mafiosa en programa político. Cada vez que aparecía en televisión jactándose de su éxito empresarial, fabricaba un signo que naturalizaba el saqueo como modelo de conducta. Trump es el rostro obsceno del imperio saqueador porque no tiene siquiera la máscara de civilización con que otros presidentes disfrazaron sus crímenes. Él se vanagloria del robo, lo exhibe, lo celebra. Es la honestidad brutal de un imperio que ya no necesita fingir moralidad.

Su imperio de engaños. Pero si Trump es síntoma de la decadencia imperial, lo es sobre todo en el terreno del engaño. Su carrera política se levantó sobre una catarata de mentiras; el “birtherismo” contra Obama, la negación del cambio climático, las promesas de un muro que nunca se construyó como lo anunciaba, las cifras infladas de logros económicos, las teorías conspirativas sobre las elecciones. Mintió con descaro porque descubrió que la mentira, en la era digital, no necesita ser verosímil; basta con ser ruidosa, basta con viralizarse.

Trump convirtió la mentira en arma de masas. Sus tuits eran misiles semióticos cargados de odio, racismo y falsedad. Sus discursos eran espectáculos diseñados para movilizar emociones antes que para comunicar verdades. Fue el gran estafador semiótico que entendió cómo manipular la indignación, cómo explotar el resentimiento, cómo fabricar enemigos y cómo victimizarse al mismo tiempo. Bajo su mandato, la mentira dejó de ser un defecto político para convertirse en estrategia central. No importaba cuántas veces fuese desmentido; sus seguidores no buscaban verdad, buscaban pertenencia a una narrativa emocional. Trump creó un ecosistema de engaño donde los hechos eran irrelevantes y lo único importante era la lealtad al líder. Así, se consolidó como figura arquetípica del imperio de los engaños; un vendedor de humo que sabe que la mercancía simbólica más rentable es la ilusión de grandeza. El “Make America Great Again” no es un programa político; es un signo vacío diseñado para manipular deseos colectivos.

Síntomas de la decadencia imperial. Trump no inventó el militarismo, ni el saqueo, ni la mentira política. Pero los llevó a una forma de obscenidad inédita. Representa la etapa en la que el imperio ya no necesita ocultar sus crímenes; los exhibe con orgullo. Su figura es la confesión más clara de que el capitalismo estadounidense se sostiene únicamente en la violencia, el robo y la manipulación. Cada gesto de Trump nos muestra que el imperio ya no puede sostenerse con promesas de bienestar colectivo. Sólo le queda la imposición del miedo, el despojo sistemático y el engaño masivo. Trump es el síntoma de un orden que se descompone y que, en su decadencia, se vuelve más peligroso. En términos semióticos, su figura es un signo saturado de contradicciones; un millonario que se presenta como defensor de los pobres; un evasor fiscal que dice proteger a los trabajadores; un mentiroso compulsivo que acusa a todos de falsedad; un imperialista que se disfraza de nacionalista. Ese juego de espejos es la expresión más acabada de un imperio que vive de su propia impostura.

No más imperio decadente. Decir no más imperio de armas, saqueos y engaños es decir también no más Trump. No como individuo, sino como modelo de dominación. No más la lógica del empresario saqueador convertido en presidente. No más la política de la mentira como espectáculo. No más la normalización de la violencia como identidad nacional. Trump es una advertencia para el mundo; lo que él representa no es sólo una presidencia fallida, es la dirección hacia la que el capitalismo arrastra a la humanidad si no se lo detiene. Es la barbarie maquillada de reality show. Es la democracia convertida en circo. Es la verdad convertida en mercancía descartable. La tarea histórica es desmontar no sólo a Trump, sino a todo el sistema que lo produce y lo sostiene. Desarmar el imperio de las armas que multiplica guerras. Desmantelar el imperio de saqueos que destruye pueblos y ecosistemas. Desenmascarar el imperio de engaños que manipula conciencias y fabrica consensos para la opresión.

Insurrección de los pueblos contra la decadencia imperial.

Nuestro desafío no es simplemente derrotar electoralmente a personajes como Trump. El desafío es más profundo; construir una semiosis revolucionaria emancipadora que rompa con el círculo de miedo, codicia y mentira. Entender que cada signo es campo de batalla. Derrotar cada palabra, cada imagen, cada relato del imperio y gestionar las semiosis para la emancipación. Trump utilizó los signos como armas de dominación. Nuestra tarea es revolucionar el sentido como herramienta de liberación. No más miedo, sino solidaridad. No más saqueo, sino justicia. No más engaño, sino verdad organizada. Trump es síntoma de un imperio en ruinas. Nuestra tarea es que esas ruinas no nos sepulten, no las necesitamos lo que nos urge es un nuevo humanismo de género nuevo, de paz pero no sin armas, (armas de la independencia: San Martinianas, de Morazán, de Artigas, de Hidalgo, de Morelos de Bolívar) contra los saqueos y contra los engaños. No más Trump. No más imperio de armas burguesas. No más imperio de saqueos. No más imperio de engaños.

china-desfile-home-1024x576.jpg

China Conmemoró el 80º Aniversario de la Victoria en la Guerra de Resistencia contra la Agresión Japonesa

Prensa LAUICOM- El 3 de septiembre, China celebró en la Plaza Tiananmen, en Beijing, el 80º aniversario de la victoria sobre Japón en la Segunda Guerra Mundial. El acto conmemorativo, que tuvo lugar con un desfile militar de gran envergadura, destacó el papel histórico de China en la derrota del fascismo durante el mayor conflicto bélico de la historia, un aporte reconocido por historiadores internacionales que sitúan al país como una de las principales potencias ganadoras.

La ceremonia fue presidida por el Presidente Xi Jinping, quien realizó una revista de tropas y dirigió un discurso ante más de 50.000 asistentes. En su intervención, Xi afirmó que el pueblo chino “se mantiene firme en el lado correcto de la historia” y abordó los desafíos globales actuales, como los conflictos en Ucrania, Palestina y Medio Oriente, así como las tensiones comerciales impulsadas por Estados Unidos.

El desfile, compuesto por 45 formaciones, incluyó la participación de veteranos de la guerra de resistencia contra la agresión japonesa, así como de unidades modernas de las Fuerzas Armadas chinas. Durante la exhibición, se presentaron armas de nueva generación, destacando el avance tecnológico y el riguroso proceso de modernización de la Armada, el Ejército y la Fuerza Aérea del país, lo que reflejó el desarrollo continuo de su estructura de defensa nacional.

La conmemoración contó con una significativa presencia internacional. Más de 20 líderes mundiales asistieron a los actos oficiales, reforzando el peso geopolítico de China en el escenario global. Entre ellos se encontraban el Presidente de Rusia, Vladimir Putin; el Presidente de Irán, Masoud Pezeshkian; el Líder de Corea del Norte, Kim Jong-un; y el Presidente de Indonesia, Prabowo Subianto

La jornada concluyó como un evento de carácter conmemorativo, enfocado en honrar el pasado, reafirmar el compromiso con la paz y proyectar la imagen de una China moderna, segura de su papel en el orden internacional.

1959222_0_320_3072_2048_0x1080_80_0_0_e747e5bedf5fe2549eecc29e37c1fbdc.jpg

La OCS y los Aliados del Orden Multipolar: Diálogo, Soberanía y Cooperación en un Mundo en Reconfiguración

Prensa LAUICOM – El 1 de septiembre de 2025, se celebró en Tianjin, China, el 25º Consejo de Jefes de Estado de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), presidido por el Presidente de China, Xi Jinping, en el Centro Internacional de Convenciones y Exposiciones de Meijiang. Participaron líderes de los países miembros, entre ellos Vladimir Putin (Rusia), Narendra Modi (India), Kassym-Jomart Tokayev (Kazajistán), Sadyr Japarov (Kirguistán) y otros, además del Secretario General de la OCS, Nurlan Yermekbayev. El encuentro, marcado por una intensa agenda de cooperación regional y global, reafirmó el compromiso colectivo con una geopolítica más equilibrada.

Bajo el lema “Impulsando el Espíritu de Shanghái: La OCS en Acción”, los líderes reforzaron la cooperación en seguridad, economía, desarrollo sostenible y tecnología. Se aprobaron 24 documentos, incluida la Declaración de Tianjin y la Estrategia de Desarrollo de la OCS hasta 2035, así como una declaración conmemorativa por el 80º aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial y la creación de la ONU, resaltando el papel histórico de los países miembros en la lucha contra el fascismo y su compromiso actual con un orden mundial más justo, democrático y multipolar, que desafíe las estructuras hegemónicas del sistema internacional.

Además, se firmaron acuerdos clave para establecer el Centro Antidrogas de la OCS y el Centro Universal para Contrarrestar Amenazas a la Seguridad, mecanismos que refuerzan la capacidad de la organización para enfrentar desafíos transnacionales con enfoques coordinados y soberanos. Estos consolidan la OCS como un actor central en la geopolítica euroasiática, promoviendo soluciones autónomas frente a las intervenciones unilaterales y las imposiciones externas.

La cumbre otorgó a la República Democrática Popular de Laos el estatus de Socio de Diálogo de la OCS y a la Comunidad de Estados Independientes (CEI) el de Observador, ampliando así su influencia en Asia Central y más allá. Cholpon-Ata, en Kirguistán, fue designada “Capital Turística y Cultural de la OCS” para 2025–2026, destacando el papel del intercambio cultural en la construcción de una identidad compartida basada en el respeto mutuo y la diversidad.

El evento coronó la presidencia china (2024–2025), un periodo en el que China impulsó una visión estratégica de integración regional, soberanía tecnológica y justicia en el sistema internacional. La responsabilidad pasó ahora a Kirguistán, que presentó como tema de su mandato: “25 años de la OCS: juntos por un mundo estable, desarrollo y prosperidad”. Entre sus propuestas destaca la creación de un mecanismo de ayuda en desastres, reflejando una dimensión humanitaria que fortalece la solidaridad entre los Estados miembros y proyecta la OCS como un actor clave en la geopolítica de la cooperación.

Tras la cumbre principal, se realizó la reunión “OCS Plus”, con participación de socios de diálogo y organizaciones internacionales, centrada en multilateralismo, seguridad regional y desarrollo sostenible. Este espacio reafirmó la necesidad de construir un orden global más inclusivo, donde los países del Sur Global puedan ejercer su voz sin subordinación, promoviendo una geopolítica de cooperación, no de confrontación, y avanzando hacia un mundo verdaderamente multipolar.

Al finalizar, el Ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, y el Secretario General de la OCS ofrecieron una rueda de prensa conjunta, destacando los logros del encuentro y el fortalecimiento del papel de la OCS en la gobernanza global y regional. Subrayaron que la OCS no es una alianza militar ni una coalición de bloque, sino un espacio de diálogo estratégico que defiende la soberanía, la no intervención y la cooperación horizontal —valores esenciales para una geopolítica justa y un sistema internacional multipolar.

Voces del Sur en la construcción de un mundo multipolar

En este escenario de transformación geopolítica, Venezuela emerge como el país de América Latina que más se alinea con la visión estratégica de la OCS. Su política exterior, basada en el rechazo al intervencionismo, la defensa de la soberanía nacional y el fortalecimiento de alianzas sur-sur, refleja una profunda sintonía con el «Espíritu de Shanghái». A través de vínculos crecientes con China, Rusia, Irán y otros Estados miembros, Venezuela impulsa una alternativa concreta a la hegemonía unipolar, posicionándose como un actor clave en la articulación de una geopolítica más equilibrada y justa.

Esta visión no solo se expresa en lo político, sino también en lo simbólico y comunicacional. Es aquí donde entra en escena la Universidad Internacional de las Comunicaciones (LAUICOM), institución que, como Venezuela, defiende una transformación radical del sistema de información global. Ambos actores comparten una visión común: la necesidad de desmantelar las narrativas dominantes que legitiman el poder hegemónico y construir, desde los pueblos, una comunicación liberadora, crítica y autónoma.

LAUICOM entiende que el control de los medios de comunicación ha sido históricamente un instrumento de dominación en la geopolítica global. Por eso, su misión se centra en formar comunicadores comprometidos con la justicia social, la descolonización del conocimiento y la defensa de la soberanía simbólica. Al promover periodismo de resistencia, medios comunitarios y tecnologías de comunicación alternativas, LAUICOM impulsa una geopolítica de la palabra, donde las voces del Sur Global puedan ser protagonistas, no espectadoras.

IMG-20250902-WA0043

Son de Sucre y LAUICOM acuerdan alianza estratégica para fortalecer la comunicación popular

Prensa LAUICOM- En el marco de un conversatorio realizado en el Salón Earle Herrera de la Universidad Internacional de las Comunicaciones (LAUICOM), el Movimiento Comunicacional Son de Sucre y el Vicerrectorado de Vinculación Social y Desarrollo Territorial de LAUICOM acordaron una ruta de trabajo conjunto orientada a fortalecer la comunicación popular, la formación comunitaria y la defensa sociopolítica del pueblo organizado.

La reunión, encabezada por el Dr. Ibrahim Infante, responsable de Vinculación Social y Desarrollo Territorial de LAUICOM, y la Prof. Tamara Díaz, Vicerrectora Internacional de LAUICOM, contó con la participación de representantes de las distintas coordinaciones de Son de Sucre, movimiento que agrupa a activistas comunicacionales de 32 organizaciones del Municipio Sucre, Estado Bolivariano de Miranda.

Desde inicios de año, este colectivo ha desarrollado un proceso de autoformación con más de 20 facilitadoras y facilitadores, a través de talleres semanales enfocados en el empoderamiento comunicacional del Poder Popular.

Durante el encuentro, se destacó la propuesta de Son de Sucre de extender su experiencia, así como la organización del I Congreso Son de Sucre que se llevará a cabo del 14 al 16 de noviembre de 2025, con un pre-congreso previsto para el 1° de noviembre en las instalaciones de LAUICOM. El evento tiene como propósito central promover la unidad de comunicadores comunitarios, impulsar una red de comunicación popular y discutir estrategias para contrarrestar la guerra cognitiva imperialista.

Como resultado del diálogo, ambas instituciones acordaron cinco ejes de acción para la segunda semana de octubre de 2025: la definición de un plan de formación de formadores; la creación de un plan de intercambio en seguridad y defensa de la nación; la evaluación de certificación conjunta de saberes populares; el acompañamiento integral a la planificación del congreso; y un plan de entreayuda para aprovechar las potencialidades territoriales y académicas de ambas partes.

Esta alianza refleja un compromiso compartido con la educación popular, la soberanía comunicacional y el desarrollo territorial desde lo colectivo.

¡Urgente-1200-misiles-apuntan-hacia-Venezuela-denuncio-Maduro

Maduro denuncia despliegue militar estadounidense frente a Venezuela y reafirma compromiso con la defensa de la soberanía nacional

Prensa LAUICOM- El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, denunció este lunes un significativo despliegue militar de Estados Unidos en aguas del mar Caribe, cercanas al territorio venezolano. Durante una rueda de prensa dirigida a más de 300 representantes de medios nacionales e internacionales, realizada en el Hotel Meliá Caracas, el presidente afirmó que 1.200 misiles están apostados sobre ocho buques militares y un submarino nuclear desplegados por la administración de Donald Trump en la región.

El jefe de Estado calificó esta acción como “la mayor amenaza militar que ha enfrentado América Latina en los últimos 100 años”, describiéndola como “extravagante, injustificable, inmoral y absolutamente criminal”. Aseguró que esta movilización representa una escalada de la política de “máxima presión” adoptada por Estados Unidos, que ahora adopta un carácter claramente militar. En respuesta, Venezuela ha declarado su “máxima preparación para la defensa de la nación”, basada en el cumplimiento estricto de la Constitución Nacional de 1999, cuya vigencia reafirmó durante el acto al mostrar un ejemplar del texto constitucional.

El presidente subrayó que la respuesta venezolana se enmarca en el marco legal del país y en la voluntad de proteger la soberanía, la integridad territorial y la paz. Destacó el papel fundamental de la movilización popular, alabando la “firmeza, conciencia patriótica y espíritu de resistencia” mostrado por el pueblo venezolano en los recientes días de tensión.

Hizo referencia a las jornadas de alistamiento nacional convocadas los días 23, 24, 29 y 30 de agosto, como parte de una estrategia de defensa integral que articula a las fuerzas militares, policiales y civiles. Según datos presentados por el presidente, más del 90% de la población venezolana rechaza las amenazas externas, una cifra que calificó como récord en cualquier contexto estadístico. Además, agradeció el respaldo de movimientos internacionales, organizaciones solidarias y sectores de opinión pública mundial, incluyendo voces en Estados Unidos, por su condena a las acciones de la administración norteamericana.

En su discurso, el presidente Maduro comparó la actual situación con la crisis de los misiles de octubre de 1962, cuando el mundo estuvo al borde de una guerra nuclear entre Estados Unidos y la Unión Soviética por el despliegue de armamento en Cuba. Consideró que no existe precedente similar en el Caribe ni en el hemisferio occidental en tiempos recientes, y citó al intelectual dominicano Juan Bosch para enfatizar que el Caribe ha sido históricamente una frontera imperial, pero nunca escenario de una provocación de esta magnitud.

En su discurso, el presidente Nicolás Maduro aseveró que detrás del reciente despliegue militar estadounidense en el Caribe estaría lo que calificó como la «mafia de Miami», un grupo al que indica de haber tomado el control del poder político en la Casa Blanca y el Departamento de Estado, distorsionando la política exterior de Estados Unidos. El jefe de Estado afirmó que esta influencia ha «mayamizado» dicha política, imponiendo una visión extremista no solo contra Venezuela, sino contra toda América Latina y el Caribe, al considerar que amenazar a Venezuela equivale a amenazar la estabilidad del continente entero. Denunció que estos sectores han promovido la peor versión de la llamada «máxima presión», transformándola en una estrategia de confrontación militar que profundiza la tensión en la región.

Finalmente, el jefe de Estado dirigió un llamado directo al presidente Donald Trump, instándolo a no dejarse arrastrar por lo que calificó como una “diplomacia de las cañoneras”. Le advirtió que aceptar estas presiones podría manchar su nombre con una “masacre contra el pueblo venezolano” y desencadenar una guerra continental. Sin embargo, expresó confianza en que Trump, a quien calificó de inteligente, tomará decisiones en favor de la paz. El gobierno venezolano reiteró su compromiso con el derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas, que prohíbe el uso de la fuerza contra Estados soberanos. El presidente aseguró que Venezuela seguirá defendiendo su independencia con dignidad, en unidad nacional y en apego a la ley, frente a cualquier intento de intervención o agresión externa.

IMG_20250901_143841_126

¡Asamblea General de Trabajadores y Trabajadoras de LAUICOM fue un éxito!

Prensa LAUICOM- La Universidad Internacional de las Comunicaciones (LAUICOM) celebró el 1 de septiembre su Asamblea General de Trabajadores y Trabajadoras de LAUICOM, un espacio colectivo de reflexión, formación y organización que reunió a docentes, personal administrativo, autoridades institucionales y representantes del poder popular en sus instalaciones. El encuentro tuvo como propósito fortalecer la unidad interna, reforzar la seguridad institucional y promover herramientas para enfrentar las campañas de desinformación que afectan al país.

La vicerrectora Tamara Díaz abrió el acto destacando la importancia de conocerse como colectivo y de asumir la seguridad como una responsabilidad compartida. Subrayó que muchas de las noticias que circulan actualmente sobre supuestos vínculos del gobierno venezolano con el narcotráfico, como el llamado “cartel de los soles”, no tienen fundamento y forman parte de una estrategia de desestabilización ya vista en años anteriores. “Las noticias de hoy son muy parecidas a las de hace hace años. Son información falsa que buscan desprestigiar al país y justificar agendas ajenas a nuestros intereses”, afirmó. En ese sentido, llamó a la comunidad universitaria a ser críticos con la información que consumen y a no caer en las trampas de la manipulación mediática.

Wilmer Verdú, secretario institucional de LAUICOM, hizo un llamado a fortalecer la movilización social como herramienta fundamental para demostrar el respaldo popular al presidente Nicolás Maduro. Hizo enfasis en la necesidad de visibilizar los esfuerzos de la comunidad universitaria a pesar de que LAUICOM no cuenta con estudiantes de pregrado como otras universidades, Verdú enfatizó que eso no debe limitar su capacidad de incidencia. Anunció la necesidad de hacer un inventario de los recursos disponibles para mejorar la puesta en escena en las actividades callejeras. Además, propuso fortalecer los vínculos con las comunas cercanas, con el fin de construir una red social organizada desde la base y más resistente a las presiones externas.

Durante el evento se presentó la serie de videos “Claramente”, producida por la licenciada Clara Vega, que analiza las campañas internacionales contra Venezuela. A través de tres videos expuso cómo el país es víctima de una guerra híbrida y una guerra de narrativas, donde se promueve la idea falsa de que Venezuela es un “narcoestado” para justificar posibles intervenciones militares y el control de sus recursos naturales. “¿Cómo puede Estados Unidos hablar de corregir el narcotráfico si es uno de los países con mayor consumo de drogas en el mundo?”, preguntó en uno de los videos, resaltando la hipocresía de esas acusaciones.

Por su parte, el profesor William Capó desarrolló una charla titulada “Quince Claves para Aplicar el Método Dialéctico de Análisis de Coyuntura”, en la que explicó que la coyuntura no es solo lo que ocurre en el presente, sino el conjunto de condiciones políticas, sociales y económicas que permiten entender el momento histórico y actuar con claridad.

Wilmer Mora Zambrano, encargado de la Dirección General de Gestión de Seguridad de LAUICOM, insistió en que la prevención es más efectiva que la reacción. “Solo quienes conocen los riesgos pueden proteger un lugar”, afirmó, y recomendó medidas concretas como el uso obligatorio del carnet de identificación visible y una vestimenta adecuada dentro del recinto, dada la relevancia política y académica de quienes trabajan y visitan la institución.

El evento concluyó con un fuerte mensaje de unidad, compromiso y responsabilidad colectiva. Las autoridades y participantes coincidieron en que, en tiempos de crisis y presión externa, la organización, el conocimiento y la movilización son pilares fundamentales para defender la institución, el pueblo y la soberanía nacional.